Hace una semana Lupita Jones, dirigente del certamen mexicano en el que se elige a la representante para Miss Universo, declaró sobre : “Una mujer nacida mujer jamás va a ser igual que un transgénero, biológicamente no son iguales. No estoy de acuerdo porque no me parece una competencia que se esté dando bajo las mismas condiciones”.

Después, al inicio de esta semana, circuló en redes sociales el video de Itzel Aidana Ávila Monreal, una activista de la comunidad LGBTTTI que pidió a Lupita Jones medir sus comentarios al respecto de la comunidad, y posteriormente se quitó la vida.

“Dele gracias a Dios que usted nació con una parte entre sus piernas que la identificaba con su personalidad, desafortunadamente nosotras no.

Fíjese muy bien lo que habla porque gracias a esos pensamientos, gracias a esas opiniones, muchísimas personas se suicidan, muchísimas personas se sienten rechazadas y humilladas muchísimas personas están sufriendo en carne viva el infierno de estar en un cuerpo que no pertenece”, expresó Ávila Monreal en un video publicado en Facebook.

Haciendo frente a las críticas que recibió al respecto, Jones aseguró, a través de un video publicado en su cuenta de Facebook, que no es responsable de las acciones que terceras personas tomen en su vida y que cada quien decide cómo vivirla e incluso la manera de enfrentarla, en un acto de deslindarse de toda responsabilidad del suicidio de Itzel.

“No soy responsable de las decisiones que terceras personas tomen con respecto a su vida, cada quien decide cómo vivirla y cómo enfrentar los problemas.

La vida no es fácil para nadie, en la medida que estés feliz contigo mismo, y seguro de quién eres, y lo que haces, lo que suceda alrededor no debe moverte ni tus objetivos ni tus posturas”, aseguró Jones.

Por otro lado, también defendió su derecho a opinar e hizo hincapié en que sus comentarios no deberían molestar ni dividir a ningún sector de la sociedad. Su objetivo era únicamente ejercer su derecho a opinar y a su libre expresión.

“Mis comentarios nunca han buscado dividir, señalar ni generar malestar en nadie. Simplemente tengo una opinión sobre las cosas.

No soy dueña de la verdad pero de lo que sí soy dueña es de tener una opinión y ejercer mi derecho de libre expresión como individuo, como mujer y como ser humano”, añadió.

Finalmente aseguró que siempre se ha conducido con respeto hacia el otro y nunca ha hecho algún tipo de distinción por diferencias sexuales o ideológicas. Además dejó muy claro que una opinión distinta no es sinónimo de odio u ofensa para el otro.