El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) amplió los niveles de alerta meteorológica a 9 provincias por la incidencia de una vaguada asociada a un sistema frontal que se mantendrá generando lluvias este fin de año.

En ese sentido, en alerta amarilla se encuentra San Cristóbal, San Pedro de Macorís, Distrito Nacional y Santo Domingo.

Mientras que en alerta verde mantienen a María Trinidad Sánchez, Samaná, Duarte, La Romana y la Altagracia.

El director del COE, Juan Manuel Méndez, exhortó a la población a mantenerse atentos y con las precauciones necesarias, puesto se esperan lluvias significativas esta Nochevieja y mañana, celebración de año nuevo.

El organismo recomienda a operadores de frágiles, pequeñas y medianas embarcaciones de la costa caribeña hoy y mañana jueves navegar con precaución debido a visibilidad reducida por fuertes aguaceros, descargas eléctricas, ráfagas de viento y oleaje localmente anormal.

El COE también recomienda a la ciudadanía mantenerse en contacto con los organismos de defensa y socorro como la Defensa Civil, Fuerzas Armadas, Cruz Roja, la Policía Nacional, Cuerpos de Bomberos y este Centro de Operaciones de Emergencia.

Asimismo, exhortan seguir los lineamientos y orientaciones de los organismos de protección civil.

Ante la ocurrencia de aguaceros se le recomienda a residentes en zonas de alto riesgo tomar las medidas de precaución necesarias ante posibles crecidas e inundaciones repentinas.

De igual forma, las personas deben abstenerse de cruzar ríos, arroyos y cañadas que presenten alto volúmenes de agua y no hacer uso de balnearios en las provincias bajo alerta.

El Servicio Nacional de Salud (SNS) informó que la estructura del Hospital Simón Stridels, en la provincia de Azua, no presenta daños tras el hecho ocurrido el viernes 26 de diciembre durante los trabajos de vaciado de una losa.

La aclaración surge en respuesta al editorial titulado “Más que un ‘incidente’, un derrumbe de confianza”, publicado por este medio. De acuerdo con un reporte de la Dirección de Ingeniería del SNS, lo sucedido no corresponde a una falla estructural del edificio, sino a un problema en el sistema de encofrado, específicamente en los puntales de madera que servían como soporte temporal.

La institución aseguró que la edificación mantiene su integridad y que el evento se limitó exclusivamente al área que está en construcción, sin provocar lesiones ni afectar la prestación de servicios médicos, los cuales permanecen suspendidos por las labores de remodelación.

Tras el colapso parcial, se realizaron trabajos de limpieza del hormigón y se retiraron los materiales comprometidos, con el objetivo de retomar la obra conforme a las normas técnicas establecidas.

El SNS también precisó que los costos derivados del incidente serán cubiertos en su totalidad por el contratista encargado del proyecto, sin generar gastos adicionales para el Estado dominicano.

El hecho ocurrió mientras se ejecutaban los trabajos de vaciado de la losa del segundo nivel del hospital, como parte del proceso de ampliación y remozamiento del centro. Según explicó el organismo, no hubo daños humanos ni consecuencias operativas.

Las intervenciones en el Hospital Simón Stridels forman parte de un proyecto integral que va más allá de una simple remodelación, ya que contempla su transformación en un hospital materno-infantil de referencia para la región.