El gobierno propone una reestructuración del Impuesto al Patrimonio Inmobiliario para que las propiedades que cuesten más de 5 millones de pesos paguen impuesto, de acuerdo al proyecto de ley de Modernización Fiscal presentado este lunes.

El proyecto establece que el mínimo exento quede establecido en el valor equivalente de una vivienda de bajo costo, que es de RD$5,025,380, y que se cobrará una tasa de un 1% del excedente cuando el valor de los inmuebles se encuentre por encima de ese monto.

Al hacer la presentación en La Semanal con la Prensa, el ministro de Hacienda, Jochi Vicente, precisó que en la propuesta del patrimonio inmobiliario gravado se incluye el valor conjunto de la mejoras y de los solares.

El funcionario expresó que en el país se recauda un 0.2% del PIB por concepto de impuestos a la propiedad, «es decir casi nada comparado con los países de la OCDE cuyas s recaudaciones por concepto de impuestos a la propiedad son en promedio de un 1.90% del PIB».

Informó que la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) procederá a realizar una revalorización de los inmuebles para llevarlos al valor de mercado del momento.

Refirió que la última revalorización se realizó en el año 2013 y esto ha causado una merma en la recaudación proveniente principalmente de las personas de mayor ingreso. Lo mismo se hará con los valores del Catastro.

La nueva propuesta de reforma tributaria ha planteado modificaciones importantes en el tratamiento fiscal de los envíos de bajo valor a la República Dominicana. Según el proyecto presentado la tarde de este lunes por el Gobierno, los artículos importados cuyo valor no supere los 200 dólares también pagarán impuesto.

Hasta ahora, estos artículos traídos generalmente vía courier, se habían mantenido sin pagar impuestos.

«Se elimina la exención de IVA (Itebis) y selectivos al consumo de las mercancías categorizadas como ‘envíos de bajo valor’ por valor menor a US$200», establece la propuesta.

Se considera que estas importaciones crean una competencia desleal para los comerciantes locales, quienes sí deben pagar impuestos por sus mercancías y ven sus precios menos competitivos frente a productos extranjeros.

De acuerdo al documento, al eliminar la exención, se incentivaría la compra de productos nacionales, fortaleciendo así la economía local y reduciendo la dependencia de productos importados.

«Estos cambios responden a la necesidad de equilibrar la competencia entre comercios locales y extranjeros, aumentar la recaudación de impuestos y modernizar los sistemas fiscales en el contexto del comercio electrónico global», indica.

A través de las importaciones de mercancía de bajo valor, el Gobierno pretende recaudar 4,173.9 millones de pesos.

El ministro de Hacienda, Jochi Vicente, dijo que se mantendrá la exención del pago de aranceles aduanales a estas mercancías.