Que bueno que el Ministerio de Educación decidió asumir la investigación de la negligencia del Colegio Don Bosco, de Moca, de no buscarle una solución a la reinscripcion de esta niña que tiene una condición físico-motora, que le hace usar un andador para caminar.

Ella fue promovida a tercero de la primaria, pero el director del plantel, un sacerdote por cierto, de nombre Rodolfo se negó supuestamente a aceptarla porque se le ocurrió poner el aula en el tercer nivel de la escuela hasta donde ella no puede subir por sus condiciones físicas, teniendo espacio disponible en la planta baja.

Sin embargo el cura al parecer no quiso apelar a la buena voluntad y a la nobleza que debe adornar a una persona de iglesia para buscarle una solución y no tomó en cuenta que en esa escuela es que la niña ha socializado, pues allí es que tiene sus amiguitos.

¡Pero que inconsciente es ese cura! ¿Debería sorprenderme? Pues no.

Asi es que actúan estos dizque servidores de la iglesia, y tu los ves desde un púlpito hablando de amar al prójimo y de hacer el bien, pero ellos mismos no practican lo que predican.