DIARIO LIBRE/SANTO DOMINGO. Las Águilas Cibaeñas (10-2) recuperaron la forma otra vez. Y lo hicieron anoche en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, donde blanquearon 6-0 a los Tigres del Licey (5-7), en un partido en el que fabricaron sus carreras después de dos outs.

La victoria le asegura un empate con el Escogido, que lucha por salir del último lugar.

Chris O’Grady (2-0) lanzó cinco entradas completas en las que sobrevivió a dos ocasiones con bases llenas y un out, pero tuvo el coraje suficiente para lograr el cero ante unos Tigres que fueron blanqueados por segunda noche consecutiva. Orlando Calixte y Danny Santana empujaron dos vueltas cada uno en base a triples.

El martes el Licey cayó 7-0 ante los Gigantes del Cibao, también en el Quisqueya. O’Grady contó con Edgar García, Richard Rodríguez y Josh Judy para completar la blanqueada al Licey.

La situación se les complica a los Tigres, que fueron vistos caer ante miles de sus seguidores, mientras los fanáticos de sus rivales saboreaban el dulzor de vencer a sus archienemigos.

Por segundo partido corrido el picheo abridor de los Tigres deja el equipo con las manos en la cabeza.

La noche anterior fue Nik Turley, quien duró sólo 0.2 entradas ante los Gigantes y anoche, Iván Piñeyro (0-1), que permaneció 3.2 entradas, aunque fue víctima de un costoso error de Anderson Hernández, que dejó con vida la primera entrada. Francisco Rosario permitió otras dos vueltas.

Además del error de Hernández en el primer episodio y varios hombres dejados en bases y particularmente en posición anotadora por Jason Rogers, Diory Hernández y Donovan Solano malograron las posibilidades del Licey ante el equipo más dominante de esta ronda semifinal.

Las Águilas, que perdieron el martes, recuperaron otra vez el mismo ritmo victorioso que mantuvieron por nueve partidos consecutivos, lo que los mantiene como líderes absolutos de la tabla y el primer equipo en alcanzar un puesto en la ronda semifinal.

El Licey fue blanqueado ocho veces en la ronda regular (y una novena si se agrega el partido que por regla se le asignó a los Gigantes, cuando incluyeron en el juego a Juan Miranda) y otras cuatro en la semifinal, para ser el equipo que más blanqueadas.

O’Grady titubeó en el primer episodio, pero manejó la situación con las bases llenas para salir sin daño alguno. En el tercero tuvo corredores en segunda y primera y dos outs, pero otra vez se las arregló para mantener sus cinco entradas sin anotación.

En el quinto, O’Grady salió engrandecido otra vez, luego de tener las bases llenas, con un out, dominó sucesivamente a Jason Rogers y a Donovan Solano a ambos con elevados al prado central.

El ataque aguilucho en el primer episodio vino después de dos outs y un error, luego de que fueron retirados Jonathan Villar (línea a segunda) y Ronny Rodríguez (de tercera a primera).

Juan Carlos Pérez disparó sencillo por el prado derecho y llegó a tercera por otro de Zoilo Almonte a la misma zona. Brayan Peña se embasó por error del segunda base Hernández, lo que permitió anotar a Pérez y Orlando Calixte coronó el episodio con un triple por el prado derecho.

Los Tigres tuvieron la oportunidad de responder cuando llenaron las bases con un out en el cierre de la primera entrada, pero O’Grady se encargó de ponchar de manera sucesiva a Jason Rogers y a Diory Hernández.

Las Águilas fabricaron dos vueltas más en el quinto episodio, también después de dos outs.

Pérez fue golpeado, Almonte falló de segunda a primera. Peña disparó sencillo para poner hombres en las esquinas, Calixte fue ponchado y el dirigente Audo Vicente trajo al relevista Marlon Arias ante Santana, quien conectó triple que empujó a los dos corredores.