SANTO DOMINGO. Ha sorprendido el acuartelamiento 100% de los militares dispuesto ayer por el ministro de Defensa, Rubén Paulino Sem, en todo el territorio nacional cuando muchos estiman que no hay una situación de orden público que demande la medida, aunque para hoy el grupo Somos Pueblo convocó una protesta contra el incremento de los precios de los combustibles a partir de las 4:30 de la tarde, para recorrer calles y avenidas de diversos sectores de la capital dominicana.

Sectores consultados por el periódico Diario Libre califican de exagerada la decisión de acuartelar a los militares, pues consideran que la convocatoria es una simple protesta, que no persigue alterar el orden público.

No obstante, se teme que la misma pueda suscitar simpatía y se produzca un gran entaponamiento en gran parte de la ciudad, debido a que la rebaja de los precios de los combustibles es una sentida demanda.

Empero, advierten que la situación se justificaría si los organismos de seguridad del Estado hubiesen detectado algún plan subversivo detrás de las protestas o que sectores extraños busquen “pescar en río revuelto”.

La capital dominicana se mantiene en calma en las primeras horas de hoy con el habitual patrullaje policial y el tránsito vehicular fluido debido a que las escuelas iniciaron su periodo de vacaciones.

Observadores de la situación entienden que el país se mantiene en calma, salvo por algunas protestas huelgarias que se llevaron a cabo en el Cibao la semana pasada y el campamento de la Marcha Verde, en demanda del cese de la impunidad, erigido frente a la sede del Poder Judicial.

En el contexto general, sobresalen las discusiones que se llevan a cabo en torno al proyecto de Ley de Partidos Políticos y las diferencias y luchas internas, que se registran dentro del partido oficial por la nominación presidencial, en que sobresalen varios precandidatos haciendo campaña en las calles.

¿Qué será?
Sin embargo, en los mentideros políticos la pregunta que muchos se hacen es cuál es la justificación de las autoridades militares para disponer un acuartelamiento de un 100%, debido a que muchos estiman que se trata de una medida extrema, que encajaría en el ámbito de una situación de turbulencia política, que no es el caso de hoy.

Con una situación política en calma, analistas políticos consideran que el 100 % del acuartelamiento pudiera ser producto de algún nerviosismo.